Bag om Memorias de Mabil
En Colombia y Venezuela solían llamarse mabil al antro o burdel entre los años 30 a 50 del siglo pasado; donde se contrataban mujeres para bailar o para el comercio sexual. La palabra mabil es una degeneración de "ma vie" (mi vida), expresión usada en Francia por las hetairas al recibir a la clientela. Además de las llamadas hetairas, zorras, prostitutas o bataclanas con derecho a habitación permanente en el mabil, otros personajes usuales en los mabiles de entonces eran los dueños o dueñas conocidos como "cabrones" o "cabronas", los clientes y, muy espacialmente, el portero. Los cuentos del mabil "La copa del olvido"- recogen las memorias de un notable, aunque ficticio, portero, conocido como El Kid Ramón, que al contrario de sus pares, usualmente caracterizados por lo vulgar y procaz, es fino y culto. En sus memorias, Kid Ramón nos narra los fantásticos sucesos de algunos de aquellos personajes, pero centrados en las bataclanas del mabil "La copa del olvido" mejor conocidas por sus motes: "La Chere", que conservó su himen como Sherezade salvo su vida: contando cuentos. "la Pelona ", que sirvió de conejillo de indias en búsqueda de la cura a la calvicie masculina. "La Chiricoca", protagonista de múltiples voces de la radionovela "Los misterios de Sorte". "La Loba", cabrona y embrujada. "la Polvo Triste", insomne que fue curada con "la máquina de soñar". "la Coneja", que pario un marciano quien llegó a ser el mayor líder de la "Iglesia de la Santa Libertad". "Madame Matilda", que patrocinó y encabezó la rebelión de las zorras. Y los clientes habituales que formaron el grupo bohemio y conspirador conocido como "Ateneo de la Meseta". Estos cuentos merecieron el Primer Premio de Narrativa de la Bienal Miguel Ramón Utrera en Venezuela.
Vis mere