Aunque nunca te he conocido, sé más de ti que nadie.
Noche tras noche, día tras día, te enfrentas a la peor pesadilla de cada padre. No lo haces porque eres excepcional o fuerte o inteligente. Lo haces porque estás obligado a hacerlo. Lo haces porque recuperar a tu hijo es tu primer pensamiento en la mañana, el último pensamiento en la noche y en cada momento intermedio.
Hay belleza en el viaje, independientemente del resultado. Lamentémonos, tengamos esperanza y luchemos, juntos.
Gør som tusindvis af andre bogelskere
Tilmeld dig nyhedsbrevet og få gode tilbud og inspiration til din næste læsning.
Ved tilmelding accepterer du vores persondatapolitik.Du kan altid afmelde dig igen.